Tras quedar viuda, una madre lucha por criar a su hijo y otros tres huรฉrfanos que adopta. Para pagar sus estudios, trabaja sin descanso cargando ladrillos incluso durante el tiempo del almuerzo. Sus cuatro hijos le recompensan con todo su amor.
El repartidor Alejandro Fernando obtiene por azar un sistema prodigioso que lo ayuda a resolver complejos problemas matemรกticos, ganarse el respeto de la familia Ruiz y acercarse a Isabela. Luego representa a Albaterra en un intenso certamen, donde brilla por su talento y eleva el orgullo cultural con un banquete ceremonial.